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Al intentarse la restauración de la ermita del Calvario se descubrieron las ruinas de un castellum aquae. Se ha fechado en el siglo I y se ubica en una de las arterias principales de la ciudad romana, el cardus maximus. Constaba, como era habitual, de un depósito, unas conducciones de agua y un nimpheum o fuente ornamental de mármol.

Castellum aquae del Calvario.

Los castellum aquae eran cisternas ubicadas en puntos estratégicos de la ciudad donde llegaba el agua procedente de  los embalses y trasportada por los acueductos. Servían como torretas de decantación y medio de distribución de las aguas. Constaban de tres partes bien definidas: el depósito propiamente dicho, las canalizaciones y la fuente.

En Emerita augusta se conoce la localización de tres de estas construcciones: una entre el columbario y la casa del Mítreo, cercana a donde se ubica la plaza de toros actual, otra detrás de la casa del Anfiteatro, en plena zona de ocio, y una tercera en la actual calle Calvario, cercana al acueducto de los Milagros.

Castellum aquae. 

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